Aguirreamalloa, Jose. Una Seducción Misteriosa. Palabra, 2024

Amorós, Andrés. Filosofia Vulgar. Fórcola, 2023

Ariely, Dan. Misbelief. Heligo Books, 2023

Arnau, Juan. Materia que respira luz. Galaxia Gutenberg, 2024

Brinckmann, Sven. La alegría de perderse cosas. Koan, 2024

Cavanaugh, William T. The Uses of Idolatry. Oxford, 2024

de la Cruz, Sor Juana Inés. Contra la ignorancia de las mujeres. Taurus, 2023

Errigel, Adriano. Blasfemar en el Templo. Monóculo, 2023

Freire, Jorge. La banilidad del bien. Páginas de Espuma, 2023

Han, Byung-Chul. La tonalidad del pensamiento. Paidos, 2024

Hernandez, Paloma. El fin de la izquierda. Sekotia, 2023

Hester Helen y Nick Smicek. After Work: a History of the Home and the Fight for Free Time. Verso, 2023

Galán, Agustín. La modernidad ignorante. KDP, 2023

Garcés, Marina. El tiempo de la promesa. Anagrama, 2023

Gomá Lanzón, Josep. Universal Concreto. Taurus, 2023

Gonzalez, Ana Marta. Trabajo, Sentido y Desarrollo. Dykinson, 2023

Graeber, David y David Wengrow. El amanecer de todo. Ariel, 2023

Lipscomb, Bejamin J. B. El Cuarteto de Oxford. Shakleton, 2023

Marina, Jose Antonio. Historia Universal de la soluciones. Ariel, 2024

McIntyre, Lee. Cómo hablarle a un negacionista de la ciencia. Cátedra, 2023

Mounk, Yascha. The Indentity Trap. Peguin Press, 2023 
Orella, Jose Luis. El Exilio Anticomunista Centroeuropeo en la España de Franco. Dykinson, 2024

Ortiz Gala, Irene. El mito de la ciudadania. Herder, 2024

Palmireno, Lorenzo. Luz Siniestra; La vocación de Marco Aantoni. KDP, 2024

Perez Adán, Jose. Sobrepoder, Anarquía y Comunidad. KDP, 2024

Pla, Josep. Calendario sin Fechas. Destino, 2023

Rivera, Juan Antonio. Moral y Civilización. Una historia. Arpa, 2024

Sennet, Richard. The Performer. Penguin, 2024

Tena, Rodrigo. Huida de la responsabilidad. Deusto, 2024

Shaw, Joseph.The Latin Mass and the Intellectuals. Arouca Press, 2023

Sowell, Thomas. Social Justice Fallacies. Basic Books, 2023

 


Andrés Amorós
Filosofia Vulgar,
Fórcola, 2023

A veces uno se permite el lujo de dejarse llevar por sus gustos y lee no solamente para aprender, que de todo se puede, sino para gozar. Y este es el caso hoy con estas dos revisiones. 
El sabio Amorós nos cuenta aquí, temáticamente ordenado, el origen y uso de los principales refranes castellanos sacándoles punta y glosa de actualidad con humor y enjundia. Al mismo tiempo, el texto es un repaso a la lengua que nos vertebra y a las aportaciones que han contribuido a su conformación, con particular referencia a los clásicos. No estamos ante un estudio erudito y científico sino, más bien al contrario, ante un ensayo de actualidad que aspira a dar carta de legitimidad a las aportaciones del refranero para el lector generalista.
Se lee rápido y con mucho agrado y provecho. Amorós, escribe muy bien y sabe un montón. En tiempos de perplejidad, distopía, inseguridad, inmadurez, y poquedad, recordamos la vigencia y la hondura psicológica de la sabiduría popular.
Además, encontramos un referente para descubrirnos humanos, esto es, capaces de aprender de nuestros errores y de confiar en las fuerzas de la cultura para sobrellevar y superar el peso de la incultura. Que no es otra cosa el mal que nos aqueja.

 

Josep Pla
Calendario sin Fechas
Destino, 2023

He dejado por escrito alguna vez que mis gustos literarios afirman el relato sobre cualquier otra composición, a excepción de la lírica en momentos de obcecación. Mis referencias y preferencias encumbran a unos autores sobre otros figurando, aparte del eximio Cervantes, en primer lugar, dos alicantinos, Miró y Azorín, después un vizcaíno, Unamuno, y tras él un gerundense, Pla. Ni qué decir tiene que, en cuanto vi esta novedad, acudí a ella, sediento. 
No defrauda el de Palafrugell en esta selección de colaboraciones de entre las más de mil quinientas que escribió para el semanario Destino. Pla es un genio del adjetivo. Los escoge y coloca muy bien haciendo de la lectura de sus textos un placer amable y sano. A la par, saca a relucir su bonhomía y experiencia dejando entrever la valía de una vida pegada al terruño y al descubrimiento de lo concreto, sencillo y propio.
Quien lo lea sentirá un regusto admirativo por un estilo inmemorial que puede bien referirse a apreciaciones que ha pasado por alto imperceptiblemente. Pla puede ayudar a ver la vida de otra manera, sin prisa ni fanfarria, de modo más auténtico. De gustibus non est disputandum, pero hay aquí piezas magistrales, como ésa que relata un clásico futbolístico de su tiempo, o sus disquisiciones sobre gastronomía o los viajes en avión. 

 

Javier Gomá Lanzón
Universal Concreto
Taurus, 2023

La filosofía actual es como la gastronomía de hodierno: los chefs son más importantes que los platos. Gomá es uno de los mejores chefs que conozco, de la actualidad y de entre muchos que en la gran cocina han sido sin restricciones de procedencia. Es difícil encontrar pensador más elegante, encandilante y exquisito que él. Original, sugerente, e inmejorable en la elaboración y presentación de sus creaciones. No rechazaría una invitación a ninguna de sus degustaciones, porque la experiencia me dice que siempre queda uno satisfecho. Sale uno reconfortado, interpelado, incluso admirado por tan buen relato y propuesta.
Ahora bien, si al salir del restaurante se me preguntase qué he comido, no sabría muy bien qué responder. O, al caso, como ahora, respondería que el plato no estaba mal, que para mi gusto faltaba esto y lo otro, o sobraba aquello y lo de más allá; que no sabría decir muy bien qué había tomado ni su valor nutritivo, pero que estaba excelentemente, incluso inmejorablemente, presentado; que había pasado un rato muy agradable, y que, sobre todo, era una obra de Gomá. Un creador pensante, de los mejores del mundo hoy en día.
Universal Concreto es el texto en la que nuestro autor fundamenta su Filosofía de la Ejemplaridad, un nuevo paradigma filosófico, que viene aquí dotado de la metodología, ontología, practicidad, e, incluso, poética, adecuadas para uso y disfrute de las mentes, en una etapa del recorrido de la humanidad por el tiempo caracterizada por mucha poquedad, inseguridad, masificación, y desvarío. Todo muy bien, pero.
Este revisor tiene sus peros, que relata a continuación, no sin antes continuar las alabanzas ya apuntadas, diciendo que Gomá, como gastrónomo, está aquí por encima de la gastronomía misma: muestra muy a las claras la decadencia de la filosofía y lo aparentemente poco que puede hacer ya, no obstante lo conseguido en el pasado, para salvar gustos, renovar sabores, y preservar el sentido. La filosofía, efectivamente, no es lo que era y parece que no da más de sí, como sorpresiva y taxativamente lamenta y llora el autor en el último e intrigante párrafo de su obra.
El libro va de más a menos, con un repunte final hacia arriba, de despedida. Al inicio uno duda de si lo que va a seguir habrá que ubicarlo en la psicología más que en discurso y literatura propios de la filosofía, pero, queda claro unas páginas más atrás, dónde se sitúa el bilbaíno al constatar que los autores más citados de fuentes variadas son, por este orden, Aristóteles, Platón, Kant y Rousseau. Alguno, más elogiosamente (Platón), y otro menos (Kant).
El universal concreto es la persona. Pero, y ahí está el primer pero, ¿sólo la persona? ¿Qué hay de las sociedades?, de la familia, por ejemplo. ¿Son un universal abstracto como pueda serlo el lenguaje o, incluso, como se afirma más adelante, la misma persona en su fase inicial de inmadurez estética (ni propositiva ni ejemplar) antes de llegar a su madurez ética? El mundo o la realidad de Gomá está reducido a personas y conceptos, lo que, en mi opinión, es uno de los pecados del reduccionismo filosófico vigente que ignora la sociedad como sujeto.
Quizá por eso llamo al personalismo, con todos sus logros, una filosofía pequeñita. Gomá es aquí personalista, como lo descubriremos también, más adelante, presentista o moderno. Que la sociedad no sea fácil verla desde fuera, no quiere decir que no exista de modo concreto, aunque ello sea, por otro lado, evidente: todos nacemos en sociedades y familias que ya existen sin nuestro permiso. De ahí que, en mi opinión, la filiación sea la radicalidad humana iniciática y que sea precisamente eso, el nacimiento, el misterio interpelante por excelencia para pensar lo humano. Para Gomá lo es la muerte. Misterios paralelos, si acaso, pero ninguno debe de ocultar al otro.
El reduccionismo antisocial al uso en gran parte de la filosofía contemporánea impide a algunos superar el nudo roussoniano. Éste atrapa también a nuestro autor, al aceptar sin remilgos la falacia del contrato social. La sociedad no nace de ningún contrato o pacto, más bien, al contrario, somos nosotros, cada uno, quienes nacemos por o de ella. Al ginebrino, hay que superarlo.
El capítulo sobre ontología me parece antológico. Nada que objetar y mucho que aprender. El pero, aquí, está en que, para Gomá, la ontología es instrumental. Por ella llegamos a la practicidad de la ejemplaridad y es en esta pragmática donde encontramos los mayores obstáculos para una aceptación in toto de su propuesta interpretativa. Y es que Gomá, a diferencia de Girard, cuyo fantasma vaga por las sombras de su obra sin aparecer nunca, es, además de personalista y roussoniano, definitivamente moderno. Ciertamente reconoce el carácter terminal de la época y cultura vigentes, pero parece soñar con una postergación infinita de su finitud, entre otras causas y razones, por la innovación e insumos que le podría brindar el abrazo de la ejemplaridad. Es aquí donde el sociólogo se muestra más crítico con el filósofo.
No son de recibo en una obra de esta categoría, la defensa del IDH (índice de desarrollo humano) sobre otros indicadores de mejoramiento o desmejoramiento colectivo (pp. 202-203), y no están justificadas las evidencias aducidas: que la inmensa mayoría prefiera nacer, vivir y morir en esta época, antes que en cualquier otra de la historia, y que (aquí el fantasma pululante es Fukuyama) la democracia liberal sea, como consecuencia, el mejor de los mundos habidos. Basta saber que, grosso modo y con cifras disponibles, en España nacen, desde inicio de siglo, cerca de 300.000 seres humanos al año y que, aparte, son abortados otros casi 100.000, para repensar muy bien el deseo de nacer en este país en este tiempo. Si uno tiene casi 1/4 de las papeletas para integrar el grupo de los que no superan la vida intrauterina, uno debe de buscar alternativas para la elección. Saber cómo se elaboran, y con qué presupuestos, las estadísticas de esperanza de vida al uso, da mucho que reflexionar al respecto.
De igual modo, se puede uno preguntar qué razones aduce el autor para (p.206) distinguir entre malestares y miedos de nuestro tiempo, y marginar el análisis de los miedos (bioéticos, atómicos, ecológicos y tecnológicos) en la prospectiva que nos lleva a decir que efectivamente somos los mejores de la historia.
Gomá es presentista y, como filósofo, huye de consideraciones estructurales (eso que estudian los sociólogos), para no dejar de sobrevalorar el presente y defender la modernidad a toda costa. Le gusta ser moderno y, parece, que se gusta siéndolo. Tanto, como para acabar su obra incorporando su propia afición dramatúrgica al catálogo de las terapias que necesitamos para mantener y mejorar nuestro supuesto estado de salud benéfica.
Universal concreto hay que leerlo y gozarlo con ojo crítico, como cualquier obra, y más, si está llamada a dar un salto cualitativo en la manera de elaborar y proponer ideas y pensamientos. El libro es bello, bonito, profundo y claro (el error de confundir a Constantino con Teodosio, p.170, espero se corrija en la siguiente edición). Da que pensar y mucho, y no es poco.

Helen Hester y Nick Smicek
 After Work: a History of the Home and the Fight for Free Time
Verso, 2023

No hay un término que haya cambiado más de significado a lo largo de los últimos años que el trabajo. La pregunta ¿estudias o trabajas?, ya denotaba la incongruencia. La confusión tiene que ver con la pérdida de cultura, lo que Gomá llama vulgaridad, y la dificultad de distinguir con sentido diversos modos de ocupar el tiempo, como pensionista, retirado, asalariado, voluntario, profesional, o aficionado; en el juego, deporte, vocación, empleo, ocio, servicio o contemplación; y con esfuerzo, cansancio, o goce, entre otros. 

Los autores de After Work andan totalmente confundidos en esto, pero a propósito. Son marxistas de nuevo cuño transmutados en zombies intelectuales al pretender hacer decir a Marx que el trabajo es otra cosa distinta de lo que dijo que era.

Es una lacra común a toda la literatura del postrabajo, laborófoba en esencia, que entiende el trabajo como esclavitud, pagada o no, de la que hay que librarse cuanto antes, y ello es posible ahora, gracias a la ensoñación tecnológica. La novedad en el radicalismo de izquierdas sobre el postrabajo es que esta idea no la aplica solo a la producción, como hacen los laborófobos de derechas, sino también a la reproducción, es decir, a la familia.

La propuesta es otra ambivalencia terminológica: hablar de comunalismo en vez de comunismo. Sí, las comunas (tipo Kibutz antisemita), pueden ir sustituyendo poco a poco la esclavitud doméstica que implica dedicar tiempo a la reproducción social, para apostar por tiempo genuina y genéricamente libre.

Reseño el libro porque hace pensar sobre algo necesario: la relación hogar-familia, dando datos de interés sobre lo que ha representado (y no) la innovación tecnológica en el hogar. Muestra también, por defecto, lo acertado que estuvo Etzioni al demostrar la racionalidad del altruismo y, por tanto, la posibilidad de realizarse en un trabajo servicial voluntario, algo incomprensible e irracional tanto para marxistas como para neoliberales de verdad.

 

Jorge Freire
La banalidad del bien
Páginas de Espuma, 2023

Freire es nuestro estoico de cabecera. Vaya por delante que su anterior entrega, Hazte quien eres, me gustó más. El tema aquí es ridiculizar la banalidad del buenismo, y con ello de los valores, y defender las virtudes y su encarnación y concreción en acciones positivas.

La oportunidad del texto está más que justificada. Padecemos mucha palabrería y poco compromiso. La mascarada de la pantomima nos convierte en monos de imitación que, como vomitorios de gárgola, echan fuera lo que pasa por los sentidos sin que quede nada dentro. Abundan las personalidades vacías a conciencia, temerosas de contagiarse de algún mal de rectitud que les pueda hacer odiosos ante la turba apantallada. La educación formal actual no tiene ni norte ni meta fuera del contentamiento zafio del bicho satisfecho, sin aspiraciones ni ideales que impliquen esfuerzo sin remuneración.

El léxico es rico, el enfoque y la propuesta, atractiva, sin embargo, liga poco un capítulo con otro corriendo el riesgo de parecer repetitivo. Freire provoca (a la axiología y sus voceros) pero no relata como uno desearía. El libro, no obstante, es más que necesario y viene cargado de razón, hurga de manera cabal para sanar heridas abiertas. El autor, con esta obra, ya ha dejado de ser un prometedor filósofo joven. Ahora esperamos una aportación de más peso y poso, para leer con lentitud, saboreándola entrelíneas y alejada, si puede ser, de todo afán instructivo. A los estoicos les suele pasar eso: tienen añoranza de la predicación itinerante.

 

Thomas Sowell
Social Justice Fallacies
Basic Books, 2023

Dice el estereotipado diálogo, más o menos así: si las estadísticas no mienten…/mienten/pues entonces, nada. Es una manera de señalar el aporte de esta joyita, que versa sobre la falta de criterio estadístico, tanto de las élites como de la opinión pública en general. Las estadísticas siempre mienten, o puesto en bonito: nunca son neutras. 

Sowell sorprende a sus 90 años con otro breve, incisivo, claro y tumbativo ensayo, que deberían leer, tanto sus detractores (Sowell es un viejo militante libertario del que conocíamos en castellano su Economía Básica, Deusto 2012), como sus admiradores (los mismos que votan a Milei, si bien Sowell es un académico puro). 

Para el gusto de este revisor, el profesor de la Hoover Institution de Stanford, malinterpreta aquí a Godwin (hice mi tesis sobre él, publicada curiosamente en la misma editorial en la que se edita este libro), no comprende bien qué es la sociedad, y se deja temas en el tintero, como el sexismo. Pero ello viene compensado por una demoledora crítica del igualitarismo de salón, de las élites académicas (de las que él forma parte), de la discriminación positiva para ayudar a las minorías (de las que él forma también parte), y de las políticas antidiscriminación y las dañinas soluciones implantadas contra el racismo. 

Todo esto viene contundentemente apoyado en datos ocultos en las estadísticas al uso. Resulta muy interesante el aporte sobre la desigualdad recíproca, que apoya su tesis de que las desigualdades no son resultado de la discriminación. Saca los colores a capitostes como Krugman, Deaton y Stiglitz, y si uno supera el hecho de que el texto se basa en datos gringos y está escrito para gringos, puede disfrutar de una agradable bocanada de elucidación alternativa.

 

Dan Ariely
Misbelief
Heligo Books, 2023

Trata Arieley de responder, desde la psicología, al subtítulo del libro: ¿qué hace a gente racional creer cosas irracionales?, y se centra en estudiar la epidemia de conspiranóicos y crédulos sin fuste que pululan por las tarimas mediáticas, reales o virtuales. ¿Cómo puede haber gente con estudios que todavía crea que el tabaco o las pantallas ni causan adicción ni dañan la salud?, ¿cómo, que no hay crisis ecológica ni cambio climático?, ¿cómo es que hay tanto defensor del pensamiento cerril? 

El autor explica el auge de la aversión como obstáculo a la apertura mental, que propaga, lo que llama, el remolino conspirativo de creencias falsas. Se trata de una actitud que puede llegar a ser enfermiza y dañina, tanto para uno como para su comunidad. Toda crítica debe acompañarse de una sana autocrítica que vacune (nunca mejor dicho en la era post-Covid, que trata a fondo) contra la contumaz ignorancia de la inmovilidad recalcitrante. 

Los conspiranóicos se retroalimentan continuamente a través de internet, poniendo en el mismo pedestal ciencia y superstición, sustentada ésta en la autoridad de la mera difusión. Una difusión trufada de noticias falsas en la que prima la libertad de elegir sobre la justeza de acertar. Los daños de la falsa creencia pueden ser graves, como vemos en las víctimas de la cancelación (que el mismo Ariely ha sufrido). 

En esto, poco hemos avanzado, pues en ausencia de mérito contrastado, el conocimiento y la ignorancia crecen a la par. ¿La receta? Precaución, experiencia, y reconocimiento del problema. Malatesta le dijo al cómodo: “si no vives como piensas acabarás pensando como vives”. Ariely le dice al grupo: “la crisis de confianza actual solo puede superarse filtrando los credos falsos con apertura de miras”.

 

Marina Garcés
El tiempo de la promesa
Anagrama,
2023

A Garcés le falta un hervor. Uno de los mejores exponentes de la filosofía literaria actual, todavía hace honor al título de uno de sus libros: Filosofía inacabada. Este breve y lúcido ensayo de 100 pp., casi en formato folleto, da para mucho, y bastante más daría si la autora no se complaciese en hurgar, como traviesa adolescente, en ojo ajeno, en este caso en el de la mayoría de los habitantes del planeta, adjudicando a Dios el calificativo de faltón a su palabra (los otros dos grandes faltones son el estado y el capitalismo). Ahora bien, si uno es capaz de pasar por alto la travesura, encuentra en el texto muchos motivos para confirmar que estamos ante una pensadora de fuste en ciernes. 
La capacidad de hacer promesas es el elemento básico de nuestra libertad. Sin embargo, afirma la barcelonesa, constatamos hoy que la promesa ha perdido su carácter definitorio, se ha hecho frágil y escasa. Nuestra sociedad le tiene miedo al futuro, consecuentemente hay pocas promesas y escaso compromiso. Hay, sí, predicciones, planificaciones y prevenciones, pero la palabra ha perdido su valor, amenazada por la incerteza. Hemos pasado de la época de la promesa a la del accidente, casi sin darnos cuenta. Un accidente que no interrumpe, sino que prorroga el miedo al porvenir en la triple amenaza de la crisis, el colapso y la catástrofe. 
Garcés, no obstante, confía en la palabra, que hemos de dirigirnos, primero, a nosotros mismos, para extraer esperanza con propósitos de autenticidad. Muy sugerente y bellamente escrito.

 

Yascha Mounk
The Identity Trap
Penguin Press, 2023

No creo que tarde en traducirse la última obra de Mounk, pues vale mucho la pena. Es de lo mejor que he leído sobre la manía identitaria. 
El autor, un pensador de izquierdas al modo clásico y firmemente comprometido con la defensa de la libertad, se pregunta qué ha ocurrido para que la izquierda haya sucumbido al particularismo identitario abandonando su defensa de la democracia y de los valores universales que la proponen, según él, como óptimo estado de convivencia. Su investigación le lleva al postmodernismo foucoultiano para alumbrar las razones del viraje, que glosa con sabia elucidación, análisis profundo, y belleza narrativa.
Toca y explica con solvencia todas las teclas de moda: el esencialismo estratégico, la acción afirmativa, la apropiación cultural, la diferencia entre equidad e igualdad, la cancelación, el ocaso de las grandes narrativas, la interseccionalidad, la segregación positiva, las refriegas icónicas, y otras, que convierten el identitarismo (de raza, sexo, género, opción, etc.) en una trampa social y política.
Su apuesta por la libertad es incontestable y, a veces, incluso radical. Con un discurso muy atractivo y antipopulista, al joven profesor de la Johns Hopkins, le auguro un gran futuro.

 

Joseph Shaw (ed.)
The Latin Mass and the Intellectuals
Arouca Press, 2023

No creo que este libro se traduzca al castellano. En principio dudaba que me pudiese interesar en absoluto, pero el gusto y admiración que tengo por los conversos ingleses de la primera mitad del siglo XX, me hizo echarle un vistazo. Y la verdad es que lo he disfrutado por tres razones principales. 
En primer lugar, porque he aprendido cosas que desconocía y que han retado mi imaginación al cuestionarme el diferente impacto que los cambios litúrgicos produjeron en la intelectualidad de diversos países. ¿Por qué allí sí y aquí no?, ¿cuáles fueron las razones de peso que provocaron el indulto inglés que Manning arrancó de Montini? 
En segundo lugar, porque me he reencontrado con amigos que he aprendido a comprender mejor. Así, Dawson, Belloc, Maritain, Muggeridge, Gill, o Girard. Y otros, indirectamente, como Chesterton o Tolkien. 
Y, en tercer lugar, porque mi curiosidad no ha podido resistir buscar las razones por las que Borges y Zambrano se apresuraron con tanto celo a firmar las sucesivas peticiones para que la vieja liturgia y la cultura que encapsulaba fuesen sabiamente preservadas para goce de las generaciones venideras. 
Aunque se trata de una colección de ensayos con una pluralidad de autores, está bien escrito con mira didáctica. Interesará a anglófilos nostálgicos y a quienes defienden la libertad de uso para la liturgia clásica en la Iglesia.

 

Lee McIntyre
Cómo hablarle a un negacionista de la ciencia
Cátedra, 2023

Como bien dice Juan Arnau, la ciencia no es lo que era, y como nos recordó Miguel Beltrán, a las pretensiones de neutralidad objetiva de la actividad científica hay que restarle varios enteros. McIntyre está de acuerdo con ellos, pero también, con ellos, en que ningún negacionismo está justificado racionalmente. Y es que hemos pasado de la admiración científica a la sospecha, en la medida en que nos creemos, o no, lo que conviene a nuestras identidades y hábitos adquiridos. 
Repasa aquí el profesor de Harvard algunos de los negacionismos más al uso y las experiencias de contacto con sus altavoces, para conformar un discurso que ilumina y rasca. Puede ser divertida la entrada, cuando glosa el caso de los terraplanistas (en auge, aunque parezca mentira), pero puede no ser tan agradable el discurso, perfectamente documentado, cuando se dirige al adicto consumidor de tabaco que se piensa inocente, o al sectario que se cree ecuánime al anteponer su ideología a los datos para negar el cambio climático de causa antrópica, el efecto saludable de las vacunas, o la misma evolución. 
Son muy interesantes los datos aportados sobre el sesgo político del negacionismo, que permite diferenciar entre negacionistas fachas y rojos, y sus principales banderines de enganche: el antiecologismo facha y el antitransgenismo rojo, si bien obvia el más importante de estos últimos: la negación del derecho a la vida naciente. 
Al negacionista, dice, hay que ponerle ante el espejo para que vea: sus evidencias selectivas, su miedo conspiranóico, su apoyo en falsos expertos, sus errores lógicos, y su falta de comprensión científica. Y cuenta que, cuando ello se hace con perseverancia, se logra, a la larga, que la razón se abra paso entre ideologías e identidades de uno y otro signo.

 

 


 

Bejamin J. B. Lipscomb
El Cuarteto de Oxford
Shakleton, 2023

Estamos ante una joya de muchos kilates. Una biografía intelectual compartida de cuatro mentes señeras del pensamiento contemporáneo a cuenta del entorno de excelencia y exigencia oxoniense: Foot, Anscombe, Murdoch y Midgley. 
Lipscomb ha sabido meterse en la mente de cada una de ellas y en sus relaciones de amistad para conformar un texto, mitad novela, mitad ensayo, que engancha yendo de menos a más y haciendo que sus 400 pp. sepan a poco. Puede decirse que el protagonista del texto es la maravillosa mezcla simbiótica destilada entre el genio femenino y la cultura académica de la segunda mitad del siglo XX, ya lamentablemente periclitada. Por eso, el libro se lee con aromas nostálgicos si uno se queda solamente con lo que, en definitiva, es un relato histórico. 
Pero es que hay mucho más aquí. Me refiero a la propuesta de la vida intelectual, válida y más necesaria que nunca, para toda persona de cualquier edad y sexo, en este fin de época que vivimos. Foot era la más desconocida para mí, siendo como fue, seguro anclaje para las otras tres. Anscombe, un genio coherente, madre de 6 hijos, un baluarte contra el mundo. Murdoch, siempre incomprendida, famosa y única, leal y fiel solo a la verdad. Y Midgley, mi favorita, paciente, constante, viendo con claridad lo que poca gente atisbaba a intuir. 
Cómo es que hay ahora personas, con más medios que nunca, a las que la propuesta de la vida intelectual no les atrae nada? Lean este libro, por favor.

 

Ana Marta Gonzalez
Trabajo, Sentido y Desarrollo
Dykinson, 2023

No hay mayor indefinición que un globalismo omnicomprensivo. Aquí abajo al menos, lo que es todo es nada. Y, desgraciadamente, eso es lo que aprecio que le pasa un poco a la filosofía actual. El futuro de la disciplina puede quedar en entredicho al constatar la pérdida de rumbo que proyecta, entre algunos académicos del área, cierta ambición desaforada. Me refiero a una, latente o manifiesta, doble pretensión: la de hacer pasar todo saber por su venia, y la de hablar de todo con su etiqueta, poniendo detrás de filosofía de, lo que a uno le venga en gana. Esta tesitura lastra, con pesada carga, el texto que comentamos hoy, desde su inicio a la conclusión. Y es una pena. 
Es una pena porque la autora sabe, es sabia, y porque dice cosas sensatas, tiene sentido común. Sin embargo, muchos de los asertos y desarrollos que aparecen en el texto, no sé si por impedimentos editoriales o de otro tipo, quedan deslavazados, desactualizados, y desprovistos de autoridad competente. No oculta la profesora de Navarra, por otro lado aquí clara, sus pretensiones: en primer lugar, defender la presencia de la filosofía y su validez académica como báculo que debe acompañar cualquier instrucción, y, en segundo lugar, confirmar una supuesta primacía de la disciplina sobre el resto de áreas de conocimiento, mayormente aquí, por el tema que trata, sobre la economía, la sociología y la psicología. Primum philosophari. 
Dicho esto, que es como para ponerse en guardia, hay que añadir que a Ana Marta González no le asusta el trabajo, tema del libro. Ni como ocupación, pues se ha puesto en ello a fondo en esta investigación yendo a fuentes consagradas para dotar de fuste sus argumentos, ni como propósito, ya que no parece haberse arredrado ante un tema lejano para una trayectoria basada en la especulación reflexiva. No sé si será esta la causa por la que le ha salido, a mi entender, un libro antiguo. Viejo por sus fuentes (los autores más citados son Marx, Aristóteles, Weber, Simmel, Smith, Hegel y Kant) y viejo por su estructura, de concepto, historia y aplicaciones. 
A la profesora de Navarra tampoco le asustan los retos vitales. Es valiente y casi temeraria, navegando en un mar de incertezas, lo que hace, a mi juicio, que en medio del fragor del análisis pierda intuiciones básicas. La crítica de Anscombe a Ayer de entender fenoménicamente la realidad, se le puede aplicar aquí, pues al apreciar los colores, ruidos, olores y formas de la realidad social, a González parece que se le escapa la sociedad misma, que no aparece como sujeto en todo el texto. Mal, por cierto, bastante extendido en su disciplina. 
Sobre la comprensión del trabajo, es ambivalente. A veces parece asirse a lo intrínseco y subjetivo, eso que plenifica a cada ser humano, y otras veces opta escolásticamente por intentar concretar una abstracción, como buscando una definición que dote de claridad una tiniebla. Uno piensa que el tema es más sencillo, siempre y cuando lo alejemos de toda pretensión de perennidad (otro defecto disciplinar): el trabajo no es sólo lo que el agente cree que hace, sino lo que se aprecia que hace cuando ocupa determinado rol socialmente establecido en la cultura en la que opera. Es, por tanto, creo yo, un bien expresivo, interno o externo, que rinde productos, tangibles o intangibles, originados por una acción humana. La primera parte del libro, dedicada al asunto, hace historia, repasa autores, trata de deslindar confusiones, pero se pierde entre datos y reflexiones que no acaban de insertarse en la realidad que hoy tenemos delante. 
El capítulo 5, está muy bien y recomiendo al estudioso su lectura. Otros que siguen, en mi opinión, no tanto. Se nota que ha querido abarcar demasiado y los contenidos no caben en las más de 350 pp. de prieto texto. Así, los capítulos de espiritualidad y del desarrollo están traídos por los pelos y merecerían un análisis y reflexión aparte y distante, siempre y cuando quien escribe no quiera ser adjetivado de intrusista. Y ello vale, incluso, para alguien tan abarcante como nuestra autora. 
Ana Marta González es particularmente injusta y dura con la economía, a la que embiste con frecuencia tratando de echarla de un campo que le es propio. Pienso que es lo suficientemente inteligente para darse cuenta de que lo que dice, por muy sensato y justo que parezca a sus colegas filósofos y a cierto público clientelista, jamás será aceptado por la academia, que, gracias a Dios, desterró ya hace tiempo de los claustros ese tufillo feudal de la concepción y compartimentación jerárquica del saber. Quizá no pudo decir que no, al encargo o encomienda que representaba esta investigación. No sé si este libro es el fin de la historia del grupo de investigación sobre trabajo, cuidado y desarrollo del que es directora, o si, por el contrario, es un punto y seguido. Si así fuere, le aconsejaría, con perdón por el atrevimiento, un poco de humildad disciplinar. Que cada quién hable y escriba de lo que ya sabe, para no acabar convirtiendo esa gran disciplina que es la filosofía en un popurrí temático.

 

 

David Graeber y David Wengrow
El amanecer de todo
Ariel, 2023

 

No me gustan los libros ladrillo. Pesan demasiado y son poco manejables. Éste, de 840 pp., ha sido una excepción. 
Siempre he apreciado a Graeber, y espero que Wengrow siga ahora su estela porque, de verdad, queda mucho por hacer. Desde Rousseau a Harari, pasando por Diamond, Fukuyama y Pinker, se han dicho muchas tonterías sobre qué es y cuándo se conforma eso que llamamos civilización. La visión lineal de la historia como progreso, la manía etiquetadora de quienes se ven como culmen de un proceso (ilustración, modernidad, etc.), o el atrevimiento de elegir las causas del mejoramiento humano según la conveniencia de intereses varios, quedan desveladas y denunciadas aquí, con claridad y contundencia. Realmente la historia dice más de quien la escribe que de sobre quien se escribe. 
Todo historiador debe de asumir el criterio de falsabilidad renunciado a elegir, y menos a pontificar, causas, dependiendo de fuentes incompletas e ignorando todo eso “que todavía no se ha encontrado”. Las historias de la historia antigua, nos han dado multitud de ejemplos de pifias y errores, cuando no de invenciones y falsedades que perduran (bastantes, mostradas aquí), que deben de afilar el descreimiento sobre mucho de lo que asumimos que conformó nuestro pasado. Aparte de que eso de “nuestro”, hay que ponerlo en contexto. ¿Quiénes son “ellos” o “vosotros” en el pasado? 
Me han parecido particularmente interesantes los capítulos sobre la libertad, la desigualdad, la democracia, y el estado. Muy ilustrativos. 
Bien escrito y con tono amable, con nivel académico pero asequible al gran público, este “ladrillo” pesa, pero no se hace pesado

 

 

Sor Juana Inés de la Cruz
Contra la ignorancia de las mujeres
Taurus, 2023

 

Consta este texto de Sor Juana (1648-1695) de la famosa carta a Sor Filotea de la Cruz (realmente el obispo de Puebla), y de la carta al su confesor (ex-confesor al momento) intitulada Autodefensa espiritual. En ambas sale a relucir el valor humano y literario de una de las grandes plumas del Siglo de Oro de las letras españolas. Sus 90 pp. son una delicia artística, una pertinente reflexión histórica, y un contundente mensaje con enseñanzas de calado, tanto para el feminismo reivindicativo, como para la consejería espiritual. Uno de esos libros que se leen de un tirón y que a uno nunca le gustaría acabar. 
De sus variadas enseñanzas, me permito resaltar tres apreciaciones. La primera es la justeza de la exigencia ilustrada. En una época que minusvalora el estudio y considera la sabiduría un azar desigual e injusto, el ejemplo de una mujer en búsqueda de conocimiento sin aspiraciones dinerarias se hace pertinentemente ejemplar. La segunda es la importancia de la defensa de la libertad interior, propia y ajena, y de la libertad de las conciencias, en la vida espiritual. Y la tercera, es la denuncia del mal de la envidia, más dañino que la soberbia, en la medida en que la envidia añade a ésta, cuando el vicio anida en asientos de poder, la ignominia de la crueldad. 
Las circunstancias de la vida de Sor Juana, relatadas en este libro, no son muy distintas de las que podemos encontrar hoy en día, dentro y fuera de la Iglesia. Su determinación y predicamento pueden hacer sonrojar a tantas y tantos que se dejan llevar por la holganza, la vida fácil, y el afán mundano de obtener el máximo provecho con el mínimo esfuerzo. 

 

 

Agustín Galán Machío
La modernidad ignorante
KDP, 2023

 

 

¿Cómo hemos pasado, en tan pocos años, de la sociedad del conocimiento a la de la ignorancia? Una pregunta, que Galán contesta aquí con tino. A mi juicio, más acertadamente que Peter Burke (Ignorancia, Alianza, 2023) y que Renata Salecl (Pasión por la ignorancia, Paidos, 2023). El estudio de la ignorancia, agnotología, está de moda. Los presupuestos de Galán son que el homo ignorans es directa consecuencia del atiborramiento informativo y del desempoderamiento que la complejidad de un mundo sistémico ha provocado en sus habitantes. La sociedad es hoy exponencialmente mucho más inteligente que cada uno de nosotros. 
¿Dónde está esa inteligencia? En ningún reservado visible, ni siquiera en la nube. Está en las instituciones, tradiciones, modos, inercias, corporaciones, herramientas, y relaciones, que configuran nuestra segunda naturaleza, pues la primera, esa que era básicamente biología y geología, ha dado paso a esta otra, que es social. Estamos, pues, en un mundo inteligente habitado por ignorantes que no tienen más remedio que confiar. 
¿Y eso es malo? No del todo. Pues si sé lo que no sé, ya sé mucho. Malo es cuando no sé lo que sé, y esa ignorancia es fruto de un barrido selectivo de memoria o mero autoengaño. Así, en el lado menos malo, hay una ignorancia reflexiva y sana que puede perpetuar una modernidad diferente y más humana, por la que apuesta nuestro autor. 
Galán se basa en Lamo y Ortega, y más lejanamente en Giddens y Beck, para conformar un texto erudito, pelín popperiano: la historia no tiene ni causas ni efectos si descontamos el azar y la imprevisibilidad que emana de la libertad humana. Gustará a estudiosos de ciencias sociales, filósofos orteguianos, y progresistas desencantados. 

 

 

Adriano Errigel
Blasfemar en el Templo
Monóculo, 2023

 

 

Hay verdades que solo se pueden decir con seudónimo, y en este libro hay muchas. Erriguel blasfema en el templo de la corrección política denunciando las falacias de una ideología convertida en credo religioso. Ataca su liturgia, sus dogmas, su jerarquía, su memoria colectiva, y sus propuestas de vida santa. Y lo hace con un lenguaje moderno, una erudición brillante y puesta al día, y planteamientos originales y sugerentes que te interpelan hasta las entrañas. No hay duda, que sabe de lo que habla y que lo presenta con una franqueza y contundencia que se echa de menos en la literatura ensayística actual. 
Son más de 550 pp. de debate irreverente en un combativo tono académico dotado de nítida claridad, al que seguirá otro u otros volúmenes. Es literatura hiriente y, al mismo tiempo, atrapante, que no se puede obviar. Quien no esté de acuerdo, y es difícil estar de acuerdo en todo lo que dice pues el autor confiesa su ánimo provocativo, tendrá que responder. Es lo bueno de este libro. Si motiva respuestas del mismo nivel intelectual y de la misma calidad narrativa, estamos de enhorabuena. 
Tres temas resaltan aquí. El análisis y crítica del liberalismo como teoría política, que Erriguel sitúa en la izquierda; la justificación de una derecha, que llama mutante, en el contexto de superación del encorsetamiento político del siglo XX, todavía vigente; y la introducción del debate sobre las razas humanas como piedra de toque de lo que opina que es el sectarismo ideológico y político de la academia actual. 
Son debates tácticos de pura guerra cultural. Si la postverdad disfraza y noquea verdades, la postmentira, lo suyo, viene al rescate para derribar al noqueador a la lona. Muy lúcido y sugerente, independientemente de donde uno se posicione. 

 

Rodrigo Tena
Huida de la responsabilidad
Deusto, 2024

No había leído a Tena hasta ahora, pero no podré dejar de hacerlo en el futuro. Su texto es un maravilloso compendio de erudición, sabiduría y pertinencia, que le hace a uno reconciliarse con la literatura jurídica, en este caso en absoluto árida ni técnica. Tena tiene una formación humanista de muchos quilates y capacitación en un amplio elenco de saberes. El resultado es un logro intelectual de peso. Y esto lo dice alguien que no está del todo de acuerdo con su postura. 
El texto hace un análisis profundo de la culpa, buscando al responsable a través de la historia, las culturas y las religiones. El problema, la pregunta, es, qué hemos hecho para que deleguemos nuestros compromisos en un sistema que de facto fomenta comportamientos irresponsables. Hay una crítica muy bien argumentada a lo que conforma el vigente sistema de protección y producción, que llamamos estado liberal moderno y capitalismo, que el autor entiende como desviados de sus esperanzadores y prometedores logros. 
Aconseja como terapia, más virtud y ejemplaridad ciudadana, comenzando por una educación para la responsabilidad personal. No está mal, pero eso ya lo habíamos oído. ¿Dónde, a fin de cuentas, anclamos eso que llama, detectar, escuchar y decir la verdad, una vez hemos desechado, como hace él, un retorno a la religiosidad? 

 

Juan Antonio Rivera
Moral y civilización. Una historia
Arpa, 2024

A los filósofos, sigue el dicho, no se les puede dejar solos. A lo que alguien podría replicar: “peor es dejarles mal acompañados”. Esto es lo que le pasa a Rivera. Para explicar la génesis de la moral, nada menos, y para hacerlo desde el punto de vista del animal grupal que somos, decide acompañarse, no de las ciencias sociales, sino de la biología y de la psicología. Y de paso, como si nada, pretende dejarnos un libro que quiere ser original diciendo cosas que nadie ha dicho antes y, al tiempo, de mucho valor. 
He de reconocer que el libro está bien escrito y que se lee rápido a pesar de sus 430 pp. Y también que es divertido y muy atrevido, pues los enfoques y la nueva terminología (moral fría, cálida, discreta y continua; el juego de los inconscientes evolutivos y colectivos; ideágoras, racionalismo híbrido, etc.) le dan un toque misterioso y refulgente. No hay índice de nombres, pero el revisor apuntaría que los más citados serían, por este orden, Darwin, Freud, Kant y Haidt. Rivera, por otro lado, es muy suyo, y procura etiquetarse para no llevar a engaños confesando y repitiendo su fe en la trinidad: liberal, materialista, y evolucionista. 
Fuera de la filosofía, depende mucho de sus querencias lectoras, tomando de aquí y de allá, según le parece más acertado. Así, los constructos y relatos que hace para defender el individualismo y la modernidad occidental. El resultado es un texto muy personal, donde se defiende una moral consecuencialista, y se apuesta por el ius-evolucionismo, escrito por un filósofo que se equivocó de serlo. 

 

 

Jose Aguirreamalloa
Una Seducción Misteriosa
Palabra, 2024

Esperaba su nuevo libro, pues el anterior, ya reseñado, me pareció excelente. No estoy de acuerdo con el autor aquí, aun así, el libro me ha gustado. Se trata de un breve ensayo teológico, de calado, que puede sorprender a más de uno. 
En corto, Aguirre, se lanza con una hipótesis arriesgada: la vocación universal a la santidad es una realización de la dimensión esponsal de cada uno con Cristo en el seno de la Iglesia. La desarrolla muy filosóficamente y saca sus conclusiones sobre el celibato de los laicos. En mi opinión, si he entendido bien su planteamiento, yerra en la hipótesis y en el desarrollo. 
Las razones aducidas sobre la postergación del más extendido apoyo a que la llamada a la santidad deviene de la filiación divina ganada para todos en Cristo, no me parecen convincentes. Tampoco el devaneo filosófico subsiguiente, pues entiendo que, tanto la comprensión del celibato, como del matrimonio, son difícilmente susceptibles de introspección especulativa abstrayendo la particularidad de cada caso devenida de quienes lo dan, máxime si no se acude al análisis experiencial histórico de la elección o llamada, afín al que emplea el método sociológico.  
De todos modos, el libro es útil. Breve, profundo, claro, y con lógica interna. Hace pensar, y mucho, sobre un tema capital para el creyente. 

 

Irene Ortiz Gala
El mito de la ciudadania
Herder, 2024

La tesis de Ortíz parece más que plausible, siguiendo la estela de Agamben y Esposito: los conceptos de ciudadanía y de persona, han sido socarrados por la historia, y conviene sustituirlos para hacer más incluyente, e incluso universal, la teoría y la praxis de la política. 
La lógica del texto decanta aquiescencia ante una pensadora que promete. No obstante, a Ortíz se le nota una disculpable bisoñez. Su entendimiento de la comunidad es, en línea con la abstracción especulativa, plano, bidimensional, espacial y reductivamente político. Y eso es restarle mucho a una rica dimensión de lo humano. No cita ni a Nisbet ni a Etzioni, ni sale de su disciplina, en un intento de prognosis que pretende abarcar una comprensión totalista de la sociedad humana. Le sobra suficiencia. 
Al final la cuestión es ¿vivimos en común o simplemente habitamos? Si lo segundo, valen estas disquisiciones. Si lo primero, hay que abrirse a las ciencias sociales. Son temas de indudable interés en los que conviene versarse, y para los puede ayudar una lectura inquisitiva de este libro. A un servidor le ha gustado la implícita alusión, creo que no intencionada, al ciudadano embrión. 

 

Sven Brinckmann
La alegria de perderse  cosas
Koan, 2024

A medio camino entre un sencillo texto de autoayuda, por no hablar de la desafortunada terminología del coaching ontológico, y de manual práctico de filosofía estoica para formadores de adolescentes, el texto del danés, en línea con el patrio Freire, cubre muy bien las expectativas. Es breve, claro, está bien escrito y fundamentado, hasta cierto punto, pelín sofisticado y elegante en sus referencias filosóficas, y certero y útil en sus diagnosis y terapias. 
Visto como utilidad, el objetivo a batir es el cochambroso lema de la vieja canción de Queen: lo quiero todo y lo quiero ahora. Pero visto como prognosis del tiempo presente, Brinckmann nos propone una terapia de choque que tiene su calado. Nada menos que el decrecimiento personal. Sí, basta ya de hablar y aspirar al enriquecimiento, la expansión y el llegar a más. Es hora de centrarse y gozarse en la renuncia, como una retaliación de contraataque ante el perverso ogro siempre al acecho de nuestra atención. Las armas son: templanza, moderación, simplicidad, suficiencia y autodominio. Pasar de estímulos y distracciones ajenos para centrarse en lo importante despreciando aspiraciones vanas. Perdernos cosas para encontrarnos a nosotros mismos. 
No está nada mal. Que cada quién haga su lista de lo que va a prescindir y de lo que rechaza de inicio, y a vivir (y dejar vivir) con gozo y contento. 

 

Jóse Antonio Marina
Historia Universal de las soluciones
Ariel, 2024

Hay muchos Marinas y el del ampuloso título que comentamos no es de los mejores. A este revisor le resultan salidas de contexto, incluso tomadas con sentido del humor, las no pocas alusiones que hay en el libro a su Academia de formación de líderes políticos y a su empeño por configurar unas supuestas Ciencia de la evolución de las culturas y Ley del progreso ético de la humanidad. No obstante, purgado de estas y otras marinadas, como su peculiar entendimiento del comunitarismo y los consejos que da para la solución de problemas políticos concretos de la actualidad española, el libro tiene mensajes aprovechables. 
Quizá el más interesante sea la soterrada, y a mi juicio certera, crítica que hace a la filosofía política como filosofía práctica (el nombre filosofía admite adjetivos inimaginables). Dejemos, dice Marina, la teoría política en el arcón de la Historia y, si queremos ayudar a la gente, centrémonos en la gestión de problemas. Hoy, casi todo está inventado. No hay problema político preciso y actual que no haya sido afrontado en algún otro lugar y tiempo y del no se puedan sacar jugosas recetas. Si sabemos mirar, en el breviario experiencial de la acción humana hay soluciones para casi todo. Basta estudiar sin prejuicios para saber. 
Lo de, menos ideología y más gestión, puede escocer a más de uno, pero es que el tiempo político actual, riesgoso de por sí, no está para experimentos ni para entregar el poder a visionarios e iluministas. Quizá, en esto, nuestro veterano pensador esté en lo cierto.  

 

Juan Arnau
Materia que respira luz
Galaxia Gutenbers, 2023

Uno ha de confesar que Arnau le cae bien. Comparto con el autor mayor afinidad con el pensamiento franciscano que con el dominico, preferencia por Berkeley frente a Locke y por Leibniz frente a Kant, cierta prevención con Descartes, y gusto por Bergson, Blondel, y Marcel. A diferencia de Arnau, sin embargo, uno se declara lego total en cosmología y antropología astrofísica, si bien, tras leer este libro, creo que puede atisbarse la posibilidad de que, al igual que con un ensayo de filosofía cuántica, uno pueda llegar a toparse con una historia o sociología cuánticas.  
La lección que subyace en este texto, al hilo del planteamiento de fondo que contrasta y contrapone los presupuestos ideológicos entre Einstein y Bohr, es que el tiempo de las leyes prefijadas ha pasado a la historia (de la física, al menos). Todavía no lo hemos asimilado del todo, pero la física cuántica nos impele a reformular lo que entendíamos que era la naturaleza, y a proponer una nueva cosmología. 
El libro, por otra parte, atractivo, documentado y muy bien escrito, es un alegato a favor de comprender e incorporar la interdependencia como punto de partida de cualquier epistemología. En este contexto, no hay experiencias fallidas: de todo se aprende y todo está condicionado y relacionado. Al final, no sabremos qué es antes, si la libertad o la necesidad.  
En el supuesto de que no le pesen mucho los que ya tenga, el texto gustará al lector pensante, reflexivo, y abierto a incorporar nuevos interrogantes, que es una manera, a mi juicio, de incrementar el saber.  

 

Paloma Hernandez
El fin de la izquierda
Sekotia, 2023

No llega al nivel de Erriguel, pero merece la pena conocer el planteamiento crítico de la autora sobre la postura de uno de los bandos contendientes, en esta llamada guerra cultural que centra el debate sobre fin de la modernidad. Puede resultar, por otra parte, enriquecedor, encontrarse, y asombrarse, por el alineamiento de un paradigma conceptual que le llama a sí mismo materialismo filosófico, frente y contra los herederos de lo conocido como materialismo histórico. Es el pensamiento de un filósofo original, Gustavo Bueno, de quien Hernández se considera discípula.  
De hecho, las casi 400 pp. del libro, son un resumen del pensamiento de Bueno, y de lo que hace y publica la fundación de su nombre. La eutaxia, el buen vivir, como propuesta operativa frente al idealismo gnóstico que alimenta las propuestas de la filosofía política de la izquierda actual, puede plantearse y proponerse, aunque parezca extraño, renunciando a cualquier espiritualismo y a cualquier metafísica. Nosotros no tenemos cuerpo, somos cuerpo. Carecemos de designio o destino, si bien nuestras identidades son palpables y experienciales. Es necesario hacer un esfuerzo desbrozador para pulir de falsas memorias y destinos la comprensión y el respeto que nos debemos. Así, es necesario reconocer el engaño de la globalización y la denuncia de los imperialismos ideológicos y agendas mundialistas que nos seducen. Un ejercicio de sentido común al que se incorpora la defensa de la vida, e incluso de la religión, desde, como decía Bueno, su peculiar ateísmo católico.  
Demasiado centrado, para el gusto de este revisor, en la reciente política española, agradará a quienes, inmersos en las guerras culturales del momento, buscan argumentos para vertebrar opciones políticas.  

 

Jose Perez Adán
Sobrepoder, Anarquía y Comunidad
KDP, 2024

Texto de la contraportada: 
"Sobrepoder, anarquía y comunidad", proporciona un análisis detallado del fenómeno del sobrepoder, examinando sus efectos en la sociedad y cómo influye y controla la economía. Esta es una obra sobresaliente del conocido sociólogo José Pérez Adán, que analiza el fenómeno del poder corporativo y su carácter omnipresente, multipolar y uniformador, creando un estado de dependencia y sumisión que intimida, controla y margina. 
Este ensayo, novedoso y bien fundamentado, va más allá del análisis de la sociedad y entra en áreas de estudio como el anarquismo, la religión y la economía, donde se observa cómo la dinámica del sobrepoder modula estos ámbitos. Pérez Adán sugiere que es fundamental repensar el papel del Estado en este contexto cosmopolita y globalizado, y examinar cómo la sociedad civil puede asumir responsabilidades y competir con poderes impositivos. 
El libro es una reflexión penetrante sobre el tránsito de la comunidad espacial a comunidades relacionales; estas últimas, diversas y superpuestas, donde las creencias compartidas y la moral tienen una relevancia particular. El libre ejercicio de crítica cultural y política debe ir de la mano, con propuestas posibles y realistas, ya que, aunque el sobrepoder parezca invencible, el autor sostiene que la apuesta por el autodominio puede hacerse viable en una cosmovisión global. 
El análisis de las teorías alternativas a la economía tradicional es especialmente relevante en nuestro tiempo. Con su originalidad y enfocando en los aspectos más relevantes, pero a menudo olvidados, del pensamiento alternativo en teoría política y social, "Sobrepoder, anarquía y comunidad" se presenta como una lectura indispensable para aquellos interesados en la sociología política, la religión, la economía, y la interacción entre poder, moralidad y sociedad. 
 

 

 

Lorenzo Palmireno
Luz Siniestra; La vocación de Marco Antonio
KDP, 2024
(Todas las regalías de este libro, por decisión de autor, van en donación para la Universidad Libre Internacional de las Américas, ULÍA)

En "Luz Siniestra. La vocación de Marco Antonio", Lorenzo Palmireno combina elementos de un thriller emocionante, la acción clásica del Oeste americano, y el encanto oscuro de la mejor novela negra, para ofrecer un emocionante relato, protagonizado por un joven cristiano: Marco Antonio Barberá. Esta apasionante novela en español te transportará desde los relucientes festivales de cine en Valencia hasta la bulliciosa Sydney, pasando por Ciudad de México, Chicago y Cambridge, dando un verdadero tour mundial repleto de aventuras y sorpresas.  
La trama gira en torno a la huida y posterior regreso de nuestro heroico protagonista, Barberá, para enfrentarse a su tío Witelio, el autócrata propietario del imperio mediático global de Lux Productions. Pero no es solo una historia de acción y enfrentamiento, sino una narrativa que explora la complejidad de la lucha entre el bien y el mal en una sociedad obsesionada con los medios.  
A lo largo de la trama de esta novela de ficción, Marco Antonio Barberá se enfrentará a desafíos que pondrán a prueba no sólo su coraje, sino también su coherencia, su fidelidad, y la firmeza de sus amistades. Su viaje es un retrato de cómo estos actos de integridad personal y lealtad pueden inclinar la balanza de la victoria en la eterna batalla entre el bien y el mal.  
Impregnado con notas de humanidad y una profunda empatía, esta novela nos ofrece un vistazo a un indeterminado y próximo futuro, siguiendo un ritmo acelerado que te mantendrá en vilo hasta la última página, donde se nos da una razón para albergar esperanza. 
Para los amantes de la aventura y los libros de viajes llenos de desafíos, ficción y solidez literaria, "Luz siniestra" ofrece todo esto y más. Es una auténtica prueba de la fuerza de resistencia y el resplandor humano, que no querrás perderte.

 

William T. Cavanaugh
The Uses of Idolatry
Oxford, 2024

A veces me han preguntado cómo sería un teólogo formado en las ciencias sociales en vez de en la especulación filosófica, tal y como he reclamado argumentativamente. Bien, pues la respuesta es ésta: como William Cavanaugh, por ejemplo. Su último libro, una obra mayor, es un logro que, espero, abra las mentes de quienes dirigen destinos académicos, para apuntalar donde hace falta. 
Son casi 500 pp. de prieto texto que se siguen a velocidad creciente dada la originalidad y desarrollo lógico de sus propuestas y análisis. La tesis del profesor de la DePaul University es que la llamada secularización, en la medida en que pueda entenderse como una acentuación del proceso de desencantamiento del mundo traído por la modernidad, se ha pasado de rosca y no sirve para interpretar la realidad vigente. Más bien, al contrario, no se ha dado un desencantamiento sino un malencantamieto, una sustitución de creencias, basadas en comportamientos, que apuntan a una proliferación de idólatras. 
Cavanaugh parte de un análisis profundo y crítico de la obra de Weber, Taylor, y Marion, para apuntalar su hipótesis, que, después, siguiendo siempre las fuentes escriturísticas y patrísticas de la denuncia idólatra, aplica a dos creencias falsas: el nacionalismo y el consumismo, los ídolos reverenciados y paradigmáticos del fin de la modernidad. Ambos son, en definitiva, una autoidolización o divinazación; del yo el consumismo, y del nosotros el nacionalismo. 
Muy bien argumentado, oportuno, profundo y sabio. Un texto iluminador al que hay que hacer obligada referencia. 

 

Richard Sennet
The Performer
Pernguin, 2024

A Sennett le he leído con agrado en el pasado, y alguno de sus libros justamente figuran como pauta analítica de nuestro tiempo. Sus últimas obras, sin embargo, me han aburrido muchísimo, y ésta, que es, según dice, la primera de una trilogía que espera culminar como su final aportación a la ciencia social, me ha quitado las ganas de leer las otras dos. 
En The Performer, aunque habla del actor como tipo ideal y de cómo en el escenario contemporáneo todos somos actores y espectadores al tiempo, el protagonista es, en definitiva, él mismo. Su memoria, sus experiencias, lecturas y gustos, tratando de hacer didáctica con todo eso. Como si su vida, diese para tanto. Tanto es, ni más ni menos, que sentar cátedra sobre la expresividad humana, así en general. 
No me cabe duda de que el libro, breve y liviano por cierto, será acogido positivamente, por las referencias que apunta, en el mundo anglosajón y en Francia. Pero uno no puede menos que lamentar la pertinaz cerrazón de la intelectualidad gringa para todo lo que no se ha escrito en o traducido al inglés. Que una obra sobre tema tan ambicioso no mencione ni a Sor Juana ni a Calderón, aparte de, fuera de la música (el autor fue chelista), otras aportaciones continentales a las artes escénicas, no es delito menor. 
Por otro lado, la incomprensión del autor con el catolicismo, entre otras cosas al referirse, aún con cierta elegancia, a la Misa como la puesta en escena de una sesión de magia, no en el sentido de misteriosa sino de truco, pone su pretendida elucidación en entredicho. 

 

Byung-Chul Han
La tonalidad del pensamiento
Paidos, 2024

El primero de tres volúmenes con conferencias del pensador germano-coreano en una muy curiosa edición, que en este caso plasma con texto, imagen y sonido (si se accede al código QR) tres presentaciones dadas en Portugal el año pasado. Encontramos aquí al Han más íntimo y también al más católico. Facetas ambas que pueden sorprender a algunos. 
Confiesa el autor su creciente dependencia religiosa y su modo vital de proceder, abriendo un poco su experiencia cotidiana (muy particular, por cierto) al interés curioso de sus múltiples seguidores. Han es aquí el maestro crítico de nuestro tiempo que al tiempo que se explica a sí mismo, disecciona la sociedad vigente, mostrando sus vergüenzas, lacras y lastres. Nuestra cultura es, efectivamente, una rémora sin alma abocada a su extinción. 
Curiosamente, el tema central de sus elucidaciones, así como la trama de su próximo y ya inminente libro, es la esperanza. En concreto la esperanza cristiana, que hermanada con la fe y la caridad, conforman el manual de buenas prácticas de la vida social. Han contrapone esperanza y optimismo, esperanza y pensamiento positivo, para aborrecer proyectos y creatividades, que lo único que procuran es el apuntalamiento de un sistema en derrumbe irremediable. La verdadera esperanza es crítica y necesaria en una vida mortal, que se justifica y revitaliza en un nacer de nuevo. 
El texto no defraudará a sus muchos adeptos y, como casi siempre, incomodará a la filosofía instalada en instituciones con propósito de reproducirse por replica y repetición continua. 

 

José Luis Orella
El Exilio Anticomunista Centroeuropeo en la España de Franco
Dykinson, 2024

Orella es uno de nuestros mejores expertos en Europa del Este y un historiador sin miedos presumidos. Hacía falta una investigación de este tipo precisamente ahora, cuando los discursos dominantes desde poderes instalados justifican sus ansias de permanencia en la continua reelaboración y mejoramiento de un relato primigenio. Así, el recurso a leyendas negras del pasado o a las memorias oficiales del presente. No hay nada más justificativo y autoindulgente que un buen relato propio. Este revisor no tiene nada que criticar al respecto (que cada quién diga de sí lo que quiera), aunque le repugne la imposición de cualquiera dicho. Lo que no parece tan justo, es ocultar, cercenar, o más todavía, excluir y penar el relato ajeno cuando no se ajusta al propio. Es lo que hace la cancelación. 
Orella simplemente saca a la luz aquí los hechos de un relato, no sé si cancelado a propósito, pero sí poco oído hoy: el régimen de Franco, contrariamente a la memoria histórica vigente, no era una autocracia excluyente sin propuesta exterior. Al menos, por lo que se muestra aquí, una había: la oposición activa al comunismo europeo. Y no parece que fuese ni injustificada ni de poca monta. 
El texto será, para muchos, un descubrimiento. El profesor de la San Pablo escribe bien, y la investigación y documentación es exhaustiva sin cargar demasiado la mano en lo académico, lo que hace asequible la lectura a los interesados en la temática o en el periodo.