LA CABAÑA (Stuart Hazeldine, 2017)
Sinopsis
Película muy original y sorprendente. Es la primera que la Santísima Trinidad aparece en la gran pantalla. Basada en el best seller de WM. Paul Young del mismo título que empezó a venderse en el 2007 y lleva cerca de cinco millones de copias vendidas. El subtítulo del libro reza así: “donde la tragedia se encuentra con la eternidad“.
Cuenta la historia de Mack Phillips, a quien un asesino ha matado a su hija pequeña. Toda la familia entra en depresión y, en medio de la tristeza, un día de nieve Mack recibe una carta de Dios invitándole a encontrase con Él en el sitio donde apareció asesinada su hija, una cabaña.
Algunos momentos estelares
a) El sitio. Dios no cita a nuestro protagonista en cualquier lugar. Tiene la delicadeza de hacerlo en el mismo sitio, La cabaña, en donde se le rompió el alma, donde asesinaron a su hija. Fue ahí donde cambió su vida, dejó de vivir y, por eso, es en ese sitio, donde deberá volver a tomarla. Me recuerda que Jesús hizo lo mismo con Pedro al escoger el lago de la primera pesca milagrosa (lugar de su vocación, de la llamada de Jesús y de su seguimiento) como escenario de la segunda (donde Pedro tiene que redimirse de las negaciones).
¿En qué se convierte la cabaña? Se podría contestar que en el cielo, pues está con Dios. También se podría responder que en el purgatorio porque en el cielo no se puede estar sino feliz y Mack, claramente, no lo está. Por eso pienso que ese sitio refleja la oración: está con Dios, hablando con Él, viviendo con Él…
b) El encuentro con la sabiduría provocará el primer cambio en el pensar de Mack. Ella le explicará que el hombre no tiene todos los datos para juzgar las acciones humanas. Interesante si lo confrontamos con la facilidad con la que, a veces, juzgamos a los demás.
c) Dios tiene dos objetivos fundamentales: curar a Mack del rencor y odio que ha anidado en su corazón motivados por el asesinato de su hija y por el trato que, de pequeño, recibió por parte de su propio padre. Si lo cura de esas profundas heridas su visión y trato con Dios cambiará.
Preguntas para el diálogo
1. ¿Qué razones le da Dios Padre a Mack para consolarle?
2. ¿Cómo un Dios bueno y todopoderoso puede permitir semejantes atrocidades? ¿Cómo explicar el dolor, al menos del que no ha hecho nada por merecerlo?
3. Cuando sufrimos, ¿Dios nos abandona? Así se lo pregunta Mack: “Si eres quien dices ser, ¿dónde estabas cuando te necesitaba?”.
4. ¿Qué puede facilitar el perdón: tanto el otorgarlo como el aceptarlo?
5. ¿Qué le está queriendo decir Dios a Mack cuando le dice: “cuando lo único que ves es tu dolor, me pierdes de vista”?
6. ¿Por qué Dios aparece como un personaje femenino y luego masculino?
7. ¿Ocurrió en realidad o sólo en la mente de Mack? ¿Qué razones das para sostener una postura u otra?
Jesús: “Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen” (Lc 23, 34).
F. Nietzsche: “Quien tiene por qué vivir es capaz de soportar cualquier cómo”.
“Una voz se oyó en Ramá, llanto y lamento grande: Es Raquel que llora a sus hijos, y no admite consuelo, porque ya no existen” (Mt 2, 18).
P. Salinas: “Perdóname el dolor alguna vez, es que quiero sacar de ti tu mejor tu”.
P. Claudel: “El Hijo de Dios no vino a destruir el sufrimiento, sino a sufrir con nosotros. No vino a destruir la cruz, sino a tenderse sobre ella. Nos ha enseñado el camino para salir del dolor y la posibilidad de su transformación”.
S. Tamaro: “Las lágrimas que no brotan se depositan sobre el corazón, con el tiempo lo cubren de costras y lo paralizan como la cal que se deposita y paraliza los engranajes de la lavadora”.
E.C.M.