EL ÁRBOL DE LA VIDA (Terrence Malick, 2011)2021-02-24T13:02:05+01:00

Sinopsis

Película ambientada en los años 50 que narra la historia de Jack, un niño que vive con sus padres y sus dos hermanos menores. La relación de Jack con su madre contrasta notablemente con la que mantiene con su padre; pues ella es dulce y tierna mientras que él, mucho más severo y autoritario, trata de enseñarle a su hijo a enfrentarse a un mundo donde la bondad y la honradez conllevan dejarse pisotear por los demás.

Jack, ya adulto, recuerda años después, los momentos de su infancia que forjaron su visión sobre la vida y la fe.

Algunos momentos estelares

a) La película comienza planteando la contraposición de dos posibles caminos a seguir en la vida. El de la naturaleza y el de lo divino. Así, mientras lo divino no busca agradarse a sí mismo y acepta el dolor, la naturaleza solo busca agradarse a sí misma y salirse siempre con la suya. Acabada esta reflexión en boca de la madre de Jack, la señora O´Brien; ésta concluye diciendo que le enseñaron que nadie que optase por el camino de lo divino acabaría mal. Pero esta última afirmación se tambalea cuando pierde a uno de sus hijos.

b) Tras conocerse la muerte del hermano de Jack, se suceden una serie de imágenes que muestran los orígenes de la Creación: la formación del universo, las galaxias, los volcanes, los mares, las primeras formas de vida… A lo largo de la secuencia se escucha en varias ocasiones la voz de la señora O´Brien que, ante la imposibilidad de comprender por qué Dios ha permitido morir a su hijo, le formula esa misma pregunta una y otra vez sin obtener respuesta.

c) En la homilía, durante un funeral, el sacerdote hace referencia a Job evocando así la cita bíblica, sacada del libro de Job, con la que se inicia la película. Job es un hombre justo, pero sufre el dolor y la adversidad. La desgracia ataca también a los justos. Cuando Job pregunta a Dios el sentido de sus males recibe por repuesta la mencionada cita: “¿Dónde estabas tú mientras yo ponía los cimientos de la tierra, cuando las estrellas del alba cantaban a coro y exultaban de gozo todos los hijos de Dios?”.

d) Estando el padre de Jack ausente por cuestiones laborales, la señora O´Brien explica a sus tres hijos que deben amar a todo el mundo y perdonar siempre. Es un consejo que contrasta de forma radical con los consejos de su padre, que les repite una y otra vez que la bondad lleva al fracaso porque para enfrentarse al mundo se necesita un carácter, según él, incompatible con la honradez. Esta contraposición entre los ideales de sus progenitores crea confusión en Jack.

e) Cuando el señor O´Brien pierde su puesto de trabajo se da cuenta de los errores que ha cometido a lo largo de su vida y de que lo realmente importante es su familia, muy por encima del éxito profesional. Es entonces cuando logra reconciliarse con su hijo. El haber perdido su empleo le hace más humilde y esa humildad le permite reconocer todo aquello que ha hecho mal y hacérselo saber a Jack.

Preguntas para el diálogo

  1. ¿Hace la bondad imposible o más difícil triunfar en el mundo actual? ¿Conlleva la bondad dejarse pisotear por los demás?
  2. ¿Por qué permite Dios el sufrimiento y el dolor tanto de justos como de injustos?
  3. ¿Qué actitud es mejor para educar a un hijo: la ternura y el cariño que encarna la madre de Jack o la severidad y el autoritarismo encarnados por su padre?
  4. En un momento dado la señora O´Brien dirige a Dios la pregunta: “¿Qué somos para ti?”. ¿Cuál puede ser la respuesta?
  5. ¿Por qué el padre de Jack solo logra reconciliarse con él tras haber perdido su empleo?
  6. ¿Es cierto que hemos de elegir entre el camino de la naturaleza y el camino de lo divino en nuestras vidas? ¿Qué supone tomar uno u otro camino?
  7. ¿Qué sentido tiene el reencuentro en la playa al final de la película?

Hay quien ha dicho…

P. Claudel: “El Hijo de Dios no vino a destruir el sufrimiento, sino a sufrir con nosotros. No vino a destruir la cruz, sino a tenderse sobre ella. Nos ha enseñado el camino para salir del dolor y la posibilidad de su transformación”.

N. Tommasso: “El hombre que no fue educado por el dolor sigue siendo siempre niño”.

P. Salinas: “Perdóname el dolor alguna vez, es que quiero sacar de ti tu mejor tu”.

Santo Tomás de Aquino: “La gracia (lo divino) no anula la naturaleza sino que la perfecciona”.

Luis Martínez Martínez

Comparte este artículo. Escoge tu red favorita!

Ir a Arriba