Índice
1.- Introducción …………………………………………………….7
2.- Porteros ………………………………………………………….13
2.1.- El puente sobre el río Kway ……………………………………..14
2.2.- Camino a Santa Fe …………………………………………………..20
3.- Defensas …………………………………………………………27
3.1.- Luz roja …………………………………………………………………..28
3.2.- El valle de la violencia ……………………………………………..34
3.3.- La fugitiva ……………………………………………………………….40
3.4.- Open Range ……………………………………………………………46
3.5.- Prueba de fuego ……………………………………………………..52
3.6.- Sangre, sudor y lágrimas …………………………………………58
4.- Medios …………………………………………………………….65
4.1.- El bazar de las sorpresas …………………………………………66
4.2.- Hablan las campanas ………………………………………………72
4.3.- Luz en el alma …………………………………………………………78
4.4.- Mr. Lucky …………………………………………………………………84
4.5.- Murmullos en la ciudad …………………………………………..90
5.- Delanteros ………………………………………………………97
5.1.- Diálogos de carmelitas ……………………………………………98
5.2.- El derecho de nacer ……………………………………………….104
5.3.- La muralla ……………………………………………………………..110
5.4.- Mesas separadas …………………………………………………..116
5.5.- Vive como quieras …………………………………………………122
6.- Reservas………………………………………………………..129
6.1.- Corre como una chica/Los chicos de Diciembre……..130
6.2.- Canción de cuna ……………………………………………………138
6.3.- El insulto/ Hassan & Mark ……………………………………..144
6.4.- American Fiction ……………………………………………………152
7.- Entrenadores ………………………………………………..159
8.- Público celeste ……………………………………………..167
Como un juego entre amigos, surgió la idea de hacer una selección histórica de fútbol española. Uno, tras examinar la historia desde el primer mundial (1934) en que participó España, hasta el que ganó en 2010, las estadísticas ligueras, y las características y fama probada de cada jugador en el contexto propio, y después de mucho cavilar con caracteres y posiciones, propuso la siguiente: Porteros: Carmelo, Ramallets Defensas: Quincoces, Miguelli, Garay, Puyol, Olivella, Rife, Medios: Asensi, Iniesta, Luis, Pirri, Xavi Delanteros: Gárate, Butragueño, Zarra, Quini, Gento. Ni qué decir tiene que generó muchos comentarios cuando la distribuí en listas y redes, con aclaraciones, acuerdos y desacuerdos, y sugerencias alternativas entre mis contactos habituales. Recibí entonces la petición de hacer otra selección con libros para un verano inminente, cosa que cumplí, y por lo que fui felicitado. Entonces vino otra petición de quienes más me conocían que era como un reto: haz una selección de fútbol con películas. Como estaba al tanto, no me llevó mucho tiempo, y también cumplí el encargo, que figura a continuación con los títulos en su versión original. Añadí al efecto un cuerpo de entrenadores, unas películas de sustitución o reserva, y un apartado de estrellas para el público en el estadio, quedando así: Porteros: The bridge over the river kwai, Santa Fe Trail. Defensas: Red Light, Shenandoah, Fireprooof, Open range, In which we serve, Woman on the run. Medios: Come to the Stable, The shop around the corner, People will talk, Christmas holiday, Mr Lucky. Delanteros: La Muralla, Separate tables, Dialogues des Carmélites, El derecho de nacer, You can’t take it with you. Reservas en caso de emergencia: Ride like a girl/ December boys, Canción de cuna, American Fiction, L’insulte/Hassan & Marcus Entrenadores: Bruce Beresford, David Lean, Edgar Neville, Mel Gibson. Público celeste: Walter Huston, Ginger Rogers, Ronald Colman, Walter Pidgeon, Diana Durbin, Barry FitzGerald, Melvyn Douglas, Ana Mariscal, y Robert Duvall. De igual modo que con la primera selección, siguieron comentarios, valoraciones y muchas sugerencias y aclaraciones, que respondí cabalmente lo mejor que pude. Una de ellas, sin embargo, la del porqué y con qué óptica había seleccionado esos filmes y no otros, me resultaba difícil de contestar en un simple correo efímero, pues la selección de películas tiene tras de sí cierta historia y circunstancias de oportunidad. Así que decidí ponerme a ello más sosegadamente escribiendo este libro. Se trata de filmes y gente que me han dicho cosas importantes que no me queda más remedio que agradecer. Son historias, personajes, situaciones y desarrollos que, más allá de la técnica o de los recursos cinematográficos, me dan pie para explicar (uno no puede nunca dejar de ser profesor) qué pintamos en el mundo y lo mucho que la vida nos ofrece. No soy un neófito en esto de enseñar cosas con cine. Llevo haciéndolo desde que en 1970 formé parte del club de cine de un colegio mayor, en 1973 ya dirigí otro, en el 76 comencé a dar clases de historia del cine, y años después, cuando inicié mi andadura como profesor universitario, incorporé a las clases prácticas de mis asignaturas y a la evaluación del curso, los comentarios de películas ad hoc. Fruto de esta experiencia surgió un manual de Cine y Sociedad (2005). Años después, al comenzar en la Universidad Libre Internacional de las Américas la Diplomatura en Educación en Virtudes a través del Cine, incluí alguna de las que he seleccionado aquí, para glosar y proponer virtudes concretas. Pero ahora no se trata de eso. Se trata de explicar qué me ha llevado a proponer esta selección de fútbol con cine, y cómo es que creo que estas películas, independientemente del año de su estreno, pueden servir para explicarnos el mundo de hoy y el que va a venir. En el cine, como en cualquier arte, no hay progreso lineal. El cine moderno no es mejor que el antiguo, como la pintura actual (léase también música o literatura y demás bellas artes) no es mejor que la de hace dos o siete siglos. Puede que ahora se utilicen mejores instrumentos técnicos para componer materialmente una obra, pero es absurdo defender que un texto escrito con ordenador es mejor que otro compuesto con tinta y papiro, o que un cuadro es mejor que otro dependiendo de la mezcla de tintes y diluyentes usada para obtener un color. Si el cine es arte, la técnica importa, pero poco en comparación con la historia, su secuencia y desarrollo, la interpretación, la factura, el mensaje, y su transmisión. Sí, razón y pasión al tiempo, en un equilibrio que conforma el atractivo de descubrir un sesgo de humanidad escondido en una obra de arte que, a la postre, humaniza la comprensión del vivir, con sus virtudes y lacras. Vamos a ello sin más, previniendo al lector que quien escribe es un sociólogo, y los sociólogos decimos que, si el bosque es mucho más que la suma de sus árboles, la sociedad es más que los que viven en ella en un momento dado del transcurso del tiempo. No hay que tenerle saña al blanco y negro en la pantalla. En esto, la idolización del hoy y ahora, no tienen razón de ser. ¡Ah!, se me olvidaba. La acción de sacar el libro es también la de echar el guante. Conlleva un desafío. Una selección se hace para sacar un once al campo con garantías de vencer. Como seguro que habrá alguien que recoja el guante pensando que puede sacar otra selección para ganarle el partido a la mía, le animo a que lo haga. Nada me gustaría más que, con espíritu deportivo, deleitar al respetable con una verdadera eliminatoria a partido único entre dos buenas selecciones de fútbol con películas.